El fenómeno migratorio está caracterizado por una serie de situaciones conflictivas y crisis biopsicosociales que se extienden a lo largo de todo el proceso de inmigración. Las características de ambas culturas tanto del inmigrante como la comunidad receptora van a definir el nivel de adaptación y/o integración vincular, considerada esta como la relación de integración y de aceptación mutua inmigrante-comunidad receptora. Es decir que no basta con conocer la cultura de la que se va a tratar de ser parte, sino que también se debe conocer de qué cultura vienen los diferentes migrantes para que haya más tolerancia, tampoco bastaría para esta adaptación el conocimiento o idea simple que se tiene de cierta cultura (Achotegi, 2000) ya que l la opinión y experiencia de gente de nuestro medio que ha conocido a fondo otras culturas puede haber vivido la experiencia de diferente manera. En este punto nos es importante hacer referencia a la paradoja del triunfo que consiste en la necesidad de recibir una aprobación por los compatriotas de un nuevo estado de bienestar que probablemente está más en relación con mecanismos de reparación de la culpa del que un día decide abandonar su hogar, sus amigos e incluso su cultura e irse a otra.
Se llama “crisis” a un estado agudo de desequilibrio psíquico en el que la persona se siente incapaz de afrontar la realidad de un modo razonable (Dietrich, 1986). Por lo tanto es importante ayudarle al paciente a enfrentar la crisis en vez de evitarla (ya que al evitarla caería en un sentimiento de fracaso frente a su nuevo reto) en múltiples maneras como hablar de sus miedos y angustias, fomentar el apoyo grupal, y solamente en caso estrictamente necesario la suministración de ansiolíticos. Es importante también ayudar a descubrir y conocer la realidad de los hechos teniendo en cuenta las posibles limitaciones en la comunicación, no apurar el proceso y mantener la paciencia para acceder a un mayor grado de confianza. El paciente no necesita consuelo sino tener adquirir y muchas veces recuperar la confianza en sí mismo motivándole a seguir aceptando la ayuda. Es fundamental el tener en cuenta el contexto cultural en el que se encuentra inmerso para poder mantener el equilibrio entre las soluciones y la cultura.
La inmigración constituye un importante factor de riesgo para la salud mental de la población inmigrante, debido al esfuerzo y estrés que genera el proceso de adaptación a la nueva situación. Todo esto puede generar una serie de sentimientos que son:
1) sentimientos de soledad, de incomunicación y aislamiento por el desconocimiento del idioma y de los códigos de comunicación culturales, 2) sentimientos de culpa por haber abandonado a sus familiares, amigos, país, etc., 3) sentimientos de nostalgia y deseos de volver, 4) miedo al futuro, al fracaso y a la pérdida del proyecto migratorio con sus expectativas.
Pensamos que el fenómeno migratorio es un fenómeno transgeneracional ya que afecta a los hijos de los migrantes, adolescenetes y niños quienes son llamados de segunda generación, muchas veces sufren síntomas que les puede causar angustia a temprana edad y crisis de identidad, esto también puede darse por que su fisonomía es diferente a los nativos de cierto país a donde van y puede producir rechazo que a la larga va a afectar las funciones sociales de estos migrantes jóvenes, una hipótesis podría ser que por esto se creen las pandillas o grupos alternativos donde hay entendimiento de personas que han sufrido el mismo tipo de crisis.
Este artículo nos da una visión más amplia de cómo se da la crisis y el estrés en el proceso de migración, a pesar de ser un país con un alto índice de emigración somos un país que acoge a muchos inmigrantes por lo que la tolerancia debe ser practicada y no solo esperar recibirla en otros países, porque este proceso no es fácil para quien ha abandonado todo por buscar una mejor calidad de vida arriesgando su familia y su salud mental sin saberlo muchas veces, debemos pensar que si somos capaces de recibir y tolerar a los inmigrantes en nuestro país cuando vayamos a otros países las probabilidades de ser mejor recibidos será mayor y este proceso de adaptación en la migración puede volverse más llevadero para todos los involucrados.
El fenómeno migratorio está caracterizado por una serie de situaciones conflictivas y crisis biopsicosociales que se extienden a lo largo de todo el proceso de inmigración. Las características de ambas culturas tanto del inmigrante como la comunidad receptora van a definir el nivel de adaptación y/o integración vincular, considerada esta como la relación de integración y de aceptación mutua inmigrante-comunidad receptora. Es decir que no basta con conocer la cultura de la que se va a tratar de ser parte, sino que también se debe conocer de qué cultura vienen los diferentes migrantes para que haya más tolerancia, tampoco bastaría para esta adaptación el conocimiento o idea simple que se tiene de cierta cultura (Achotegi, 2000) ya que l la opinión y experiencia de gente de nuestro medio que ha conocido a fondo otras culturas puede haber vivido la experiencia de diferente manera. En este punto nos es importante hacer referencia a la paradoja del triunfo que consiste en la necesidad de recibir una aprobación por los compatriotas de un nuevo estado de bienestar que probablemente está más en relación con mecanismos de reparación de la culpa del que un día decide abandonar su hogar, sus amigos e incluso su cultura e irse a otra.
ResponderEliminarSe llama “crisis” a un estado agudo de desequilibrio psíquico en el que la persona se siente incapaz de afrontar la realidad de un modo razonable (Dietrich, 1986). Por lo tanto es importante ayudarle al paciente a enfrentar la crisis en vez de evitarla (ya que al evitarla caería en un sentimiento de fracaso frente a su nuevo reto) en múltiples maneras como hablar de sus miedos y angustias, fomentar el apoyo grupal, y solamente en caso estrictamente necesario la suministración de ansiolíticos. Es importante también ayudar a descubrir y conocer la realidad de los hechos teniendo en cuenta las posibles limitaciones en la comunicación, no apurar el proceso y mantener la paciencia para acceder a un mayor grado de confianza. El paciente no necesita consuelo sino tener adquirir y muchas veces recuperar la confianza en sí mismo motivándole a seguir aceptando la ayuda. Es fundamental el tener en cuenta el contexto cultural en el que se encuentra inmerso para poder mantener el equilibrio entre las soluciones y la cultura.
La inmigración constituye un importante factor de riesgo para la salud mental de la población inmigrante, debido al esfuerzo y estrés que genera el proceso de adaptación a la nueva situación. Todo esto puede generar una serie de sentimientos que son:
1) sentimientos de soledad, de incomunicación y aislamiento por el desconocimiento del idioma y de los códigos de comunicación culturales,
2) sentimientos de culpa por haber abandonado a sus familiares, amigos, país, etc.,
3) sentimientos de nostalgia y deseos de volver,
4) miedo al futuro, al fracaso y a la pérdida del proyecto migratorio con sus expectativas.
Pensamos que el fenómeno migratorio es un fenómeno transgeneracional ya que afecta a los hijos de los migrantes, adolescenetes y niños quienes son llamados de segunda generación, muchas veces sufren síntomas que les puede causar angustia a temprana edad y crisis de identidad, esto también puede darse por que su fisonomía es diferente a los nativos de cierto país a donde van y puede producir rechazo que a la larga va a afectar las funciones sociales de estos migrantes jóvenes, una hipótesis podría ser que por esto se creen las pandillas o grupos alternativos donde hay entendimiento de personas que han sufrido el mismo tipo de crisis.
ResponderEliminarEste artículo nos da una visión más amplia de cómo se da la crisis y el estrés en el proceso de migración, a pesar de ser un país con un alto índice de emigración somos un país que acoge a muchos inmigrantes por lo que la tolerancia debe ser practicada y no solo esperar recibirla en otros países, porque este proceso no es fácil para quien ha abandonado todo por buscar una mejor calidad de vida arriesgando su familia y su salud mental sin saberlo muchas veces, debemos pensar que si somos capaces de recibir y tolerar a los inmigrantes en nuestro país cuando vayamos a otros países las probabilidades de ser mejor recibidos será mayor y este proceso de adaptación en la migración puede volverse más llevadero para todos los involucrados.